Cada vez son más los diferentes puntos de vista que nos podemos encontrar sobre la educación. Le damos vueltas a como actuar y como se sentirán nuestros niños cuando hacemos algo, el otro día se me ocurrió preguntar a mi madre que le pasaba a ella por la cabeza cuando eramos pequeños, si también se preocupaba por como actuar y que esperar de nosotros. Yo estoy muy contento con la forma que tuvieron de educarme, tengo una serie de principios morales que considero lo más importante y se que dependiendo de cada situación debemos comportarnos de una forma u otra. Lo que me sorprendió es que mi madre me dijo que en aquella época la gente no le daba tantas vueltas, simplemente hacían lo que creían correcto, si pensaba que teníamos un comportamiento amoral nos lo decía, no toleraba las faltas de respeto, aunque nunca me dieron ni un azote. ¿Será el problema de hoy en día que le damos demasiadas vueltas a lo que debería ser totalmente natural?, ¿Donde va la educación hoy en día?
¿Cómo debo educar?
Por lo general cuando hablamos de educación nos encontramos dos corrientes muy claras, una la de la sobre-protección y otra la de libertad y enseñanza de la autonomía. Unos a otros se tiran cuchillos, defendiendo sus posturas en cientos de libros de como educar a mi niño. Si soy una madre que no quiero crearle un trauma, no puedo darle ni un grito a mi niño, si quiero un niño independiente mejor no darle muchas atenciones cariñosas para que no se acostumbre. No le doy suero fisiológico para que no le pique la nariz…
La sociedad que vivimos nos hace que nos posicionemos en todos los aspectos de nuestra vida de una forma extrema, aunque no nos lo parezca estamos todos totalmente divididos y esta actitud la acabamos asumiendo en todos los aspectos. O eres de derechas o de izquierdas, o eres del barça o del Madrid… Nos posicionamos y es muy difícil que nos abramos a otros aspectos, nadie nos ha dicho que podemos tomar partes diferentes según la necesidad. Es bueno no gritar a los niños (ya se que en la vida les van a gritar, pero no por eso lo vamos a hacer nosotros para que ya esté acostumbrados a los 2 años, ya se acostumbrará) lo que no quiere decir que no podamos dar algún grito cuando nos sale la ha liado muy gorda. Está claro que si lo utilizamos siempre, lo que conseguiremos es que se haga insensible a los gritos y lo vea como algo normal. Si lo hacemos cuando toca en puntos concretos, se dará cuenta que no es lo mismo lo que ha liado esta vez que otras veces, ya que hay escalas. Y el debe conocerlas.
La educación es una labor que dura muchos años, diríamos que toda la vida y es imposible actuar día a día siempre igual, ya que nosotros mismos no somos iguales a diario, no tenemos la misma paciencia, no estamos igual de ánimo ni de cansados. No pasa nada por que un día no seamos el padre modelo, tenemos tiempo para corregir nuestros errores y además es una forma de que el niño sepa que no somos perfectos, que nosotros también nos equivocamos, ya que eso es la vida, no es bueno idealizar ya que no existe la perfección.
¿Por qué le damos tantas vueltas?
Estamos perdidos, hace unas décadas la moral y la ética formaban una parte muy importante de la vida, aunque ahora hay muchísima gente buena, ya nos hemos olvidado de la importancia de los principios morales, sí nos comportamos bien con los demás (bueno más o menos) pero como algo que hacemos por vivir en una civilización, no por que es la forma de comportarse naturalmente.
Un ejemplo tonto, hace no tantos años, la palabra de la gente significaba algo. Cuando una persona adulta daba su palabra, aunque no lo conocieran podían confiar en él (no quiere decir que muchos no la cumplieran y que no hubiera ladrones evidentemente) hoy en día, dar la palabra no significa nada, sabemos y estamos más que acostumbrados a que la gente no cumpla, se ha perdido el honor, que aunque nos parezca una tontería, no lo es. Evidentemente no me refiero al honor de morir por la patria o cosas así, si no hacía uno mismo, la vergüenza que sentía alguien por no cumplir o no comportarse de manera ética.
Vivimos en un mundo en que lo primero es la competencia, el más fuerte, el más listo es el que sobrevive, en el cole el fuerte humilla al débil (bueno y en el mundo de los adultos también), el listo (con dinero) consigue los buenos puestos de trabajo, el que juega mejor al fútbol es el que todo el mundo admirará… Nos obliga a luchar los unos con los otros desde que nacemos, y sabemos que el que pierde en muchos casos se queda en la estacada, pero lo justificamos por que decimos que no se ha esforzado lo suficiente. Como podemos inculcar una ética y una moral a nuestros niños, si nos pasamos el día compitiendo y teniendo que ser los mejores aunque nos suponga pisotear al de al lado, ya que si no nosotros nos quedamos fuera, lo vemos en la tele, en las películas, series desde que tienen 3 años de edad. ¿Por que nos extrañamos del bullying o mejor dicho del acoso escolar? Si solo tenemos que ver la tele un rato para darnos cuenta que es lo que está promulgando la tele a nuestros niños y jóvenes. No aguanto a la tele cuando habla del machismo, cuando si seguimos viendo después del telediario o el reportaje de turno que hayan hecho sobre el tema, veremos como están metiendo actitudes machistas una y otra vez, seguramente nos digan lo malos que son y luego nos pongan un anuncio sexista, películas donde el hombre es el duro que tiene que proteger a la chica… Nos extrañamos de que nuestros jóvenes se estén haciendo ludopatas a edades ridículas, si nos pasamos viendo en la tele los anuncios con el sello del ministerio de lo bonito y divertido que es apostar desde tu sillón con el móvil. ¿Por que creéis que hacen los anuncios? Se gastan cantidades ingentes de dinero, por que saben que la gente cuando ven el anuncio van a querer jugar. En eso consisten los anuncios.
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