LEER LA PRIMERA PARTE. Esta semana he leído en un par de periódicos, lo duro y lo innecesario que es ser padre hoy en día. Lo que me hizo ver como en los últimos años, los medios, están con una guerra entre las personas que quieren ser padres y los que no quieren. Y lo mejor, es que las explicaciones que se nos dan (totalmente ciertas) Lo duro que es, que es un compromiso de por vida, que gastan mucho dinero, que ya no vas a ser libre nunca más. Como si el tener un niño se tratara de comprar un objeto o una experiencia. En el momento en que la paternidad se engloba en un producto de consumo, algo que no te deja consumir otros productos, lo que te convertiría en infeliz. Me doy cuenta de lo que es importante para la mayoría de la gente. Analicemos la paternidad con todas sus letras.
Artículos sobre paternidad.
Está claro, hay que rellenar espacio y como blogger, se que la polemica vende. No basta con dar una opinión, si no que hay que destruir la opinión de los demás. Si no piensa como yo no me gusta. Esto está generado por los medios que vivimos, son ellos, los que enfrentan en vez de apaciguar. Al fin y al cabo, a quien le importa lo que yo haga con mi vida, o lo que hace el vecino del 2º. Si no quiere tener hijos, pues mejor para ella, creo que a mi no me va a influir en gran medida.
La paternidad puede ser muy dura o muy fácil, depende como sea nuestro niño y como seamos nosotros. Desde luego, no es un camino de rosas. Y yo me pregunto ¿Cómo durante tantos milenios, la gente ha tenido hijos y lo han sobrellevado y antes no era ni uno ni dos, sino 4, 5… Me dirás, eran otros tiempos, las cosas eran diferentes. Entonces me preguntaría, y que demonios a pasado a la civilización, para lo que hace cientos de años lo hacían como algo normal, hoy en día no se puede hacer. Acaso antes eran super mujeres (ya que además no contaban con el apoyo del marido con los niños. No como ahora que hay un gran porcentaje de padres que están totalmente involucrados con la educación de sus niños.
Egoísmo y publicidad.
No lo digo en plan despectivo. Yo también me considero egoísta en muchos aspectos de mi vida. Y es lo que han inculcado a nuestra generación, tanto los padres, los medios, el consumismo… Tenemos tantas formas diferentes de diversión, aunque todas están basadas en lo mismo. Que no pensamos en los demás. Las parejas cada vez aguantan menos, nos hemos vuelto unos exquisitos y todo lo que hace el de al lado nos parece mal. Somos exigentes sin ser coherentes. La empatía (ser capaz de ponerte en el lugar del otro) ha desaparecido en nuestra sociedad, estamos tan insensibilizados a la violencia, al sexo (los vemos tanto en la televisión y desde que somos tan pequeños, que nuestro cerebro lo ve como algo normal. No me refiero que la violencia o el sexo sea anormal. Pero si que sabemos el porcentaje de tiempo de nuestras vidas que nos debería ocupar. Calcula en el último mes, cuanto tiempo has mantenido relaciones sexuales. Ahora con un reloj apunta cuanto tiempo ves en ese mes sexo o violencia por la tele. El porcentaje no tiene nada que ver, incluso cuando eres un jovenzuelo que estás descubriendo nuevas experiencias. Se le da importancia a lo que ellos quieren (los medios). A lo mejor si miramos que el poner escenas de sexo aumenta la venta en más de un 25%. Vemos por que tenemos tanto sexo en la tele, los carteles, anuncios en la calle…
Hemos perdido la escala de importancia de las cosas.
«Si murieran mis hijos sería un alivio». Madres arrepentidas, el último tabú
Se que la vida es muy larga y la paternidad también. Y está claro que muchas veces pensamos cosas que no queremos realmente, simplemente decimos una burrada para desahogarnos. Aun así, cumple bien lo que tiene que ser un titulo de artículo llamativo. ¿Quién no picaría para ver que dice? Es marketing solo eso.
En el artículo, nos hacen un presentación de un libro, sobre una serie de madres que después de probar, se arrepienten de haber tenido niños. Ya que es más duro de lo que pensaban. Un libro que leeré en cuanto tenga la oportunidad. Entiendo que alguien pueda estar cansado de ser padre un momento como de todo. Pero la vida es larga y está compuesta de momentos buenos y momentos malos. Lo único que hay que hacer es tomar un descanso, un fin de semana, una cena… Tener hijos no quiere decir que ya no puedes estar ni 5 minutos sin ellos.
Hay casos en los que habla de una mujer con 2 hijos y embarazada del tercero, que nos cuenta el infierno que es ser madre. ¿Qué? Y ¿por qué has tenido un segundo y un tercero? Creo que si tienes 4 es aun peor. Ya nos lo contarás cuando te vuelvas a quedar.
Con lo fácil que es pasar por la vida sin el menor esfuerzo, sentado en el sofá de cañas con los amigos… Cada cual elige su futuro. Y si lees el artículo que escribió hace un año el Huffington. De la primera cosa que se arrepienten las mujeres de más de 80 años que no han tenido hijos. Es precisamente de eso, no haber tenido niños. Ahora tienes 30 años y todo es sencillo, fácil, cuando yo tenía 20, solía decir que mi vida era la fiesta. Sí, por suerte maduré y me hice mayor, a mis casi 40 años, no pienso ni parecido a lo que pensaba entonces, ni lo que pensaba a los 30. No se como acabará la experiencia de ser madre, lo mismo me salen como los del programa «hermano mayor«. Aun así, me gusta disfrutar de mis pequeñas, verlas jugar, reír, darme un abrazo, curarla una pupa, verla hacer algo nuevo como si fuera lo mejor del mundo. Ya no me acuerdo lo que era reír como hacen ellas, pero gracias a ellas, estoy más cerca de volver a vivirlo. Y tengo ganas de descubrir en lo que se van convirtiendo día a día, semana a semana,… Está claro que ahora tengo un punto flaco, un talón de Aquiles.
Pero hay algo que no me habían contado antes. Todo lo que me preocupaba antes de tenerlas, ya no lo hace. Mis preocupaciones han cambiado, que yo recuerde, siempre he tenido unas y otras preocupaciones en la cabeza, aunque nada como mis hijas.
Ellas me han ayudado a entender que es lo importante en la vida.
Deja una respuesta